Desde niña nació en mí el deseo de ser Religiosa y misionera. La mano y el amor de Dios me han ido conduciendo. Conocí a las hermanas de Ángel de la Guarda en mi pueblo, donde pasaron haciendo animación de pastoral juvenil vocacional, yo era aún niña pero ello me marcó y poco después fui al internado de Frechilla y desde allí al postulantado/noviciado. En todo mi caminar guardaba en mi corazón el deseo de ser misionera, quizás sin saber mucho lo que ello suponía y un día cuando menos lo esperaba el Señor me dijo: DEJA TU TIERRA Y VE A LA TIERRA QUE YO TE MOSTRARE. Era el 21 de junio de 1966.
Dios me ha ido conduciendo entre luces y sombras, pero siempre haciéndose sentir. Mi vida misionera comenzó el 1 de julio de 1967. Un regalo de Dios, el Mali, la comunidad de Bandiagara me acogió y poco a poco fui descubriendo que estaba llamada a vivir y caminar sencillamente con mi Dios y con mi nuevo pueblo, el Mali. Compartir mi vida con este pueblo sencillo, acogedor, anunciar el Reino a los pobres y sencillos que, me han enseñado a vivir sin grandes cosas, pero con mucho amor. HNA. MERCEDES CUADRADO