En Carabanchel Alto durante los días 23 de noviembre al 5 de diciembre, todos los Gobiernos de la Congregación nos reunimos para celebrar la XXXIV Asamblea General cuyo objetivo es preparar el próximo Capítulo General.
Preparar un Capítulo supone mirar el pasado, hacer memoria del camino recorrido, analizar los logros para agradecer y las debilidades para volver a la fuente de nuestras raíces carismáticas. Es descubrir las motivaciones que nos hacen vivir con gozo el seguimiento de Jesús, es empaparnos de los valores que nuestros Fundadores nos legaron y hacerlos visibles en el momento presente.
Preparar un Capítulo, exige una mirada contemplativa a nuestro mundo, a sus desafíos y clamores, es mirar el rostro de los desfavorecidos a la luz de la mirada compasiva de nuestro Dios. Es entrar en el corazón de la Iglesia para escuchar sus latidos, sus llamadas, su reto a una vivencia más pura del evangelio. Es unir nuestras manos de Hermanas para mirar a nuestra Congregación con el calor que da sentirnos familia, sentirnos hermanas que, juntas y en camino, queremos abrazar el futuro con esperanza. Nuestro horizonte está bien diseñado: FORTALECER LA COMUNIÓN CONGREGACIONAL PARA ANUNCIAR LA ALEGRÍA DEL EVANGELIO EN LAS PERIFERIAS EXISTENCIALES DE HOY, COMO ÁNGELES VISIBLES
En estos días de Asamblea General trabajaremos sobre los aportes enviados por las Hermanas de las diferentes comunidades como respuesta a la primera consulta para preparar el XXIV Capítulo General, tendremos también presente las propuestas formuladas en las reuniones Continentales. Elaborar el Documento de trabajo es la tarea encomendada. Contamos con la ayuda del Espíritu y pedimos vuestras oraciones.
Hna. Mª Teresa Melendro
